iOS 7 llegará este otoño y el iPhone 4 será el terminal más antiguo que podrá instala esta versión del sistema operativo. Aunque no es justo comparar el iPhone 5 con el iPhone 4, en el vídeo que encabeza el post podéis apreciar las diferencia de rendimiento y visual que existe en iOS 7 beta 2 ejecutándose en estos terminales.
El hardware del iPhone 5 es muy superior al de iPhone 4 y eso se nota desde el momento en el que encendemos el terminal. Mientras que el iPhone 5 carga el sistema en un tiempo prudencial, el iPhone 4 necesita de un intervalo mucho mayor para arrancar. A medida que nos movemos por la interfaz también se aprecian recortes estéticos como la ausencia de transparencias o del efecto Parallax que actúa sobre el fondo de pantalla.
A nivel de fluidez, el iPhone 4 se ve que está al límite y por eso en ocasiones hay un tiempo de respuesta demasiado alto que perjudica a la experiencia de usuario de la que tanto presume Apple.
Parece que este es el precio que hay que pagar para que un teléfono lanzado en el año 2010 pueda disfrutar del último sistema operativo. Esto también es un factor clave para la App Store y es que cuando muchas de las aplicaciones se actualicen con las nuevas APIs, los que no tengan instalado iOS 7 tampoco podrán disfrutar de dichas apps.
Esperemos que con el lanzamiento de las próximas betas, el rendimiento siga mejorando porque incluso en el iPhone 5, el tiempo de respuesta de iOS 7 es mayor que el que teníamos con iOS 6
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