De esta manera, y a través del último panel de Kantar sobre el pasado mes de octubre, parece que el debut de los nuevos iPhones de Apple, tanto el iPhone 5s como el iPhone 5c han llevado a la compañía a un interesante repunte en ventas, pero lo paradójico del caso es que con dos lanzamientos a la vez, el impacto de las mejoras ha quedado algo lejos de lo que fue el estreno del iPhone 5 durante su estreno.
Por este motivo, los datos para Apple no son muy positivos ya que Android llevó a cabo el 71% de todas las ventas en 12 mercados clave, frente a un 21% para el iPhone. Sin duda, no se trata de unos resultados que esperase la compañía de la manzana, sobre todo porque lo que viene a demostrar es que los de Google cada vez están más fuertes en el mercado, y la fragmentación cada vez es mayor.
El iPhone 5s genera dudas ahora
Sobre estos datos, en concreto, en los mercados importantes, como los EE.UU., Android se llevó casi el 53% de las ventas. Mientas, en Europa, Android representar casi el 71% de las ventas en el conjunto formado por Gran Bretaña, Alemania, Francia, Italia y España.
Así pues, en comparación, el año pasado el debut del iPhone 5 fue tan fuerte que ayudó a encontrar el camino de Apple a la cima de las ventas de teléfonos inteligentes en los EE.UU., superando en ese caso a Android. Este año, a pesar de que algunos habían pronosticado un alza similar, finalmente no ha sido así y al final empieza a perder un terreno cada vez más preocupante con respecto a Android.
Uno de los factores que puede preocupar a Apple, sobre todo si no despega en ventas el iPhone 5s es que EE.UU. suele ser un mercado que marca referencias, y si en este caso la tendencia está siendo a perder esa capacidad frente a los rivales, puede ser que los demás mercados internacionales sigan esa tendencia. Algo que para nada es positivo en el seno de Apple y que a buen seguro intentarán mitigar lo antes posible.
Sobre estos datos, en concreto, en los mercados importantes, como los EE.UU., Android se llevó casi el 53% de las ventas. Mientas, en Europa, Android representar casi el 71% de las ventas en el conjunto formado por Gran Bretaña, Alemania, Francia, Italia y España.
Así pues, en comparación, el año pasado el debut del iPhone 5 fue tan fuerte que ayudó a encontrar el camino de Apple a la cima de las ventas de teléfonos inteligentes en los EE.UU., superando en ese caso a Android. Este año, a pesar de que algunos habían pronosticado un alza similar, finalmente no ha sido así y al final empieza a perder un terreno cada vez más preocupante con respecto a Android.
Uno de los factores que puede preocupar a Apple, sobre todo si no despega en ventas el iPhone 5s es que EE.UU. suele ser un mercado que marca referencias, y si en este caso la tendencia está siendo a perder esa capacidad frente a los rivales, puede ser que los demás mercados internacionales sigan esa tendencia. Algo que para nada es positivo en el seno de Apple y que a buen seguro intentarán mitigar lo antes posible.
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